Gracias Virginia

Un 25 de enero nacía Virginia Woolf. Aún escuchamos sus palabras, y le damos las gracias por seguir con nosotras:

«Porque yo creo que si perduramos un siglo o dos  y tenemos quinientas libras al año y una habitación propia; si nos adiestramos en la libertad y en el coraje de escribir exactamente lo que pensamos; si vemos a los seres humanos en su relación con la realidad; si miramos los árboles y el cielo tal como son; si tratamos de ver más allá, porque no hay ser  humano que deba  taparnos la vista; si encaramos el hecho, porque es un hecho, de que  no hay  brazo en que apoyarnos y de que andamos  solas, y de que estamos en el mundo de la realidad y no sólo en el mundo de los hombres y las mujeres, entonces,  la oportunidad surgirá y la poeta muerta que fue la hermana de Shakespeare recobrará el cuerpo del que tan a menudo se ha despojado. Derivando su vida de las vidas de las desconocidas que la precedieron, nacerá. Esperar  que venga si nosotras no nos preparamos, no nos esforzamos, si no estamos decididas a que, cuando haya vuelto a nacer, pueda vivir y escribir su poesía, es del todo imposible.

 Pero  sostengo que vendrá si trabajamos por ella, y que vale la pena trabajar  hasta  en la oscuridad y la pobreza.»