Maríaconfussion

Descargar cartel    Comprar entradas

Nuestro último disco Hay camino incluye una canción titulada El corazón contento. Esta canción habla de mujeres,  mujeres que caminan juntas la vida, que atraviesan juntas los días, los otoños, la risa y las heridas. Es una canción para las mujeres extraordinarias a las que quiero. Entre estas mujeres Carmen París, músico, compositora, cantante, mujer capaz de hablar con las estrellas y con los pájaros, a la que conocí cuando teníamos dieciocho años e íbamos al conservatorio con los ojos llenos de luz y palabras. Desde entonces hemos compartido el camino.

El próximo dos de mayo en la Sala Galileo Galilei,  maríaconfussion estará en concierto y Carmen París será nuestra artista invitada, días de magia y camino. Echaremos de menos a nuestra amiga Ludmila Mercerón, las tres juntas grabamos El corazón contento, y las tres juntas tejimos muchas canciones.

Mujeres amigas, mujeres compañeras. Gracias.

Hace unos años Carmen París, Ludmila Mercerón y María Pérez Collados formaron el trío Entre nos y otras. La amistad y la colaboración entre ellas se ha mantenido a lo largo de los años y ninguna de las dos podía faltar, en la presentación del segundo disco de maríaconfussion Hay camino.

Una canción que  habla de la amistad entre  mujeres, de mujeres que comparten el camino durante años.

https://youtu.be/J3FhKGyFdvY

Tengo que agradecerle al dramaturgo y director de teatro Miguel Angel Mañas que me haya invitado a escribir uno de los prólogos de su último texto Tu palabra hágase en mí; un texto intenso, emocionante, necesario.

Encender una pequeña llama. Recorrer  territorios abandonados. Poner nombre. Señalar. Decir. Mirar lejos. Traducir el murmullo que no cesa. Detenerse un momento en el vaivén desordenado de las aceras. Levantar las esquinas sucias del mundo. Penetrar  con un dedo invisible, atravesar huesos, ligamentos, estructuras, hasta pulsar ahí, en el corazón, en la materia extraña del alma. Despertar. Despertarse.

En estos días cansados llenos de imágenes, de palabras, de ruido y prisa, Miguel Angel mira, observa, señala. Porque ocurren cosas y debemos saberlo, con la cabeza y con el alma.

Gracias Miguel Angel

Hace casi dos años, un 21 de marzo estuvimos en Sevilla, acompañando al escritor José María Pérez Collados en la presentación de su extraordinaria novela «El tren de cristal», que incluía una canción de maríaconfussion.
Fue un viaje de magia y literatura, que compartimos con Olga Bernad, Antón Castro, José María Conget y Maribel Cruzado. Días de sol, palabras, vino y música. Días que quedan para siempre enganchados a la memoria.
Ahora volvemos a Sevilla, a llevar nuestro pequeño equipaje de canciones y esperamos que un poco de esa magia nos esté esperando, como decía la canción que escribimos para «El tren de cristal»:

Siempre queda la risa detenida de ayer
se abre paso entre la niebla y de pronto se ve
tan sólo una mirada la puede hacer volver
adueñarse del día y dejar entrever. . .
maríaconfussion en concierto en La caja negra, en Sevilla

Aún recordamos aquella hermosa presentación. . .

https://youtu.be/0nFVcFdzfc8

Qué hacer una tarde de fría de invierno. Mira, hasta el viento se ha enfadado y está dando patadas a las nubes y tirando palabras por el aire. Pero suena el teléfono y oigo una voz que da calor, es una llama pequeña en medio del invierno y me invita a soñar un rato. Javier Vázquez, periodista y escritor, me invita a participar en ¡una radio novela! Cosas que ilusionan, cosas que divierten, la voz y la risa.
Javier ha escrito cinco capítulos de una radio novela titulada «Los misterios de la vega». Un guión muy bien escrito- no podía ser de otra manera, ya que Javier es un excelente escritor- lleno de personajes disparatados a los que veo intentando salir de las páginas, intentado ponerse de pie y caminar. Después los veo de verdad, en las voces de Carmen Marín, Ana Esteban, Marissa Nolla, Jesús Bernal, en la propia voz de Javier, y en mi propia voz. Alrededor de la mesa, frente a los micrófonos en los estudios de Aragón Radio vivimos durante una tarde otra vida gracias a nuestras voces.
Gracias Javier por escribir, por soñar, por darnos este regalo.
Los misterios de la vega, con las voces de Jesús Bernal, Ana Esteban, Carmen Marín, Marissa Nolla, María Pérez y Javier Vázquez. Escrita por Javier Vázquez. Control y sonido Carlos Oyarzábal.
No se pierdan el próximo capítulo. . .

A pesar del poeta, noviembre es el mes más cruel. Ahora caminamos sobre las hojas mensajeras del otoño y con cuidado vamos transportando nuestras canciones camino del invierno. Este próximo viernes 21 de noviembre descansaremos de este viaje en Dfabula, así nuestras canciones podrán salir a pasear y vivir  en el aire.  Llevaremos canciones como esta

https://www.youtube.com/watch?v=1eDU8k7t_WU

Seguimos caminando, a veces bajo la lluvia, o el silencio, o bajo ese sol tímido que se aferra a las mañanas y no quiere despedirse. Cómo lo echaré de menos cuando el invierno, adusto y frío, invada los días y las calles.

Pero seguimos caminando, aunque hay semanas tristes, semanas de ruidos inesperados, de piedras golpeando la ventana.

Pero mientras tanto, seguimos caminando.

http://youtu.be/jN96_4lKpoo

Una  llamada de Dándolo todo jota, el programa de  Aragón Televisión, nos hizo el regalo de poder caminar por el folklore, ese bosque hermoso por el que a veces nos gusta perdernos, lleno de voces antiguas y nuevas, lleno de pequeños pájaros sobrevivientes de la prisa. Esa riqueza musical transmitida a través de los pliegues del tiempo, en la que tanto creeemos y que debe cuidarse. Siempre hemos admirado mucho  a los músicos que viven en la canción popular, y en Aragón hay excelentes ejemplos.

Nosotros  hemos abierto la puerta del tiempo y en ese bosque hermoso del folklore hemos aprendido esta rogativa del pueblo de Moros; le hemos cosido una letra y una armonía y aquí esta, nuestra pequeña canción, que vuele también con los demás pájaros.

http://youtu.be/ULOt8evN4LY?list=UUIzdde21n91-khMsAGRM54g

Este septiembre cálido es como un niño obstinado que se demora por las calles. El viento guarda silencio, y esto me preocupa, ¿qué estará pensando que no se atreve a decir en voz alta? Será quizás que ve cómo el otoño  viene caminando  hacia nosotros. Mientras tanto yo vuelvo a sacar el chal viejo y ajado de virginia, y sus libros.  Este otoño las palabras de Virginia seguirán vivas y en el aire, serán pequeñas luces necesarias; aún necesarias. A mí el otoño me pone triste, pero Virginia  en septiembre de 1929 escribe

Es una hermosa mañana de septiembre; los grajos graznan, las sombras son largas y poco profundas en la terraza. El cuerpo ha salido del aire. Se está afinando para el invierno. Se está volviendo claro y puro como los ojos de un viejo.

La pureza del frío en el  aire, a veces en los ojos o en el alma. La claridad. Pienso en Virginia mientras intento sembrar de palabras  nuevas canciones que se desperezan, mientras recorro sus diarios para volver a su cuarto y conversar. Virginia me anima en la nostalgia acumulada de tantos veranos perdidos

Siempre recuerdo esos curiosos y largos paseos otoñales con los que terminábamos las vacaciones de verano, hablando de lo que íbamos a hacer, «planes otoñales», los llamábamos. Siempre se referían a la pintura y a la escritura y   cómo organizar mejor nuestra  vida social y doméstica. Siempre estaban relacionados con el otoño, las hojas que caen, el campo poniéndose pálido e invernal, nuestra mente excitada ante las perspectivas de luces y calles y comienzo de una nueva temporada de actividad: octubre, la aurora del año.

Octubre, mi mes más triste, mi verdadero mes cruel, es para Virginia la aurora del año.Cuando vuelva a su cuarto, cuando levante el edificio hermoso de sus frases, pensaré este otoño lleno de luces y calles para ella, en su habitación, todavía escribiendo. Hablando para nosotras.

Una habitación propia, en Mequinenza y en Fraga, entre las luces del otoño.

http://youtu.be/UWVAvg2NmU8

[youtube]Insert video URL or ID here[/youtube]

Esta canción nos acompaña hace ya mucho tiempo. Nació una madrugada de hace muchos, muchos años y durante un tiempo viajó sólo por donde quiera que viajen las canciones perdidas. Luego volvió, porque siempre habrá madrugadas que nos cojan despiertos, mordiendo el frío de la calle, o cazando  palabras al vuelo. La canción del alba vino con nosotros a la Fundación Amantes de Teruel el pasado seis de junio, en nuestro concierto a favor de la Fundación Villalba, fue una de las canciones que llevamos para Alberto.

Una canción para cantársela a lo vientos, una canción para caminar.

[youtube]http://youtu.be/owFHX2DWEMM[/youtube]